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domingo, 12 de diciembre de 2010

Helado de frutilla y dulce de leche!!!



Receta nº 40: Helados


Estos helados son especiales para refrigerador o frízer ya que no necesitan de la maquina heladora.

Son sencillos para que puedan fabricarlos los chicos este verano en casa y muy sanos porque sus ingredientes naturales y no poseen ningún conservante.

Helado de frutillas:

½ k de frutillas

300 gr de azúcar

½ litro de agua

500 gr de crema de leche

Lavar las frutillas y procesarlas. Poner a hervir el azúcar con el agua. Una vez fría mezclar con la pulpa de fruta. Batir la crema hasta que espese. Ir incorporando el líquido de frutillas de a poco a la crema. Volcar en recipiente apto para frízer o vasos individuales de tergopol o plástico. Dejar solidificar.

Helado de dulce de leche:

250 cc de leche

50 gr de azúcar

400 gr de dulce de leche repostero

500 cc de crema

Esencia de vainilla

Poner en una cacerola la leche, el azúcar y el dulce, colocar sobre el fuego hasta hervir, retirar y dejar enfriar bien. Batir la crema hasta que espese y agregar la otra preparación poco a poco, mientras se va mezclando. Perfumar con gotitas de esencia de vainilla. Colocar en recipientes y llevar al congelador o frízer.

Consejos manos en la masa:

· Podemos remplazar las frutillas por kiwis, duraznos o ananá.

· El de dulce de leche podemos transformarlo en banana súper Split agregando trozos de banana, dulce de leche y chocolate rallado.

· Usen la imaginación como les digo siempre y lo que tengamos en casa!!!

Tomar alimentos y bebidas heladas es una costumbre muy antigua. Se cuenta que Alejandro Magno mandaba traer nieve de las montañas para refrescar los vinos y también algunos alimentos. Es muy difícil establecer cuál es el origen del helado, ya que el concepto del producto ha sufrido sucesivas modificaciones en la medida del avance tecnológico, de la generalización de su consumo y de las exigencias de los consumidores. Pero a pesar de todo ello podemos fijar un primer hito en la historia de las bebidas heladas o enfriadas con nieve o hielo en las cortes babilonias, antes de la era cristiana. Como vemos, el helado en sus orígenes no era un producto lácteo, sino más bien frutal, los sorbetes; pero con el correr del tiempo, la leche y los derivados lácteos comienzan a utilizarse en pequeñas proporciones y luego masivamente hasta tal punto que hoy en día los helados tienen como constituyentes básicos, en la mayoría de los casos, la leche y/o la crema. También podemos decir que la fabricación de helados ha sufrido una gran revolución en nuestro siglo por el perfeccionamiento de los sistemas de frío y una maquinaria que ha permitido mejorar la producción, unido a la mejora de las normas de higiene en su elaboración. Aunque también esta revolución unida a los avances de la química y al descubrimiento de los conservantes, esencias saborizantes y colorantes, ha traído un nuevo tipo de helado, el helado industrial o químico, helado preparado para la gran distribución en grandes superficies y en cualquier tipo de establecimientos, de baja calidad y a precios inferiores, aunque en muchos casos es hasta más caro y que no tiene las mismas propiedades alimenticias que el helado natural. Por eso y ante el uso generalizado de estos productos por la mayoría de los heladeros y la gran presencia en publicidad de los fabricantes de preparados y esencias, en algunos medios especializados, dicen que un heladero tiene que ser un artista en las presentaciones de sus productos y también un buen cocinero y químico.

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